miércoles, 23 de noviembre de 2011

VIOLENCIA DE GÉNERO Y DROGODEPENDENCIA

A lo largo de este artículo, y por ser el mes de la violencia de género, queríamos hablar y presentaros  las dificultades que se encuentran las mujeres que presentan  adicción a sustancias o comportamentales y violencia de género, además de unas orientaciones prácticas para abordar estos casos en los centros de tratamiento y consultas.

Las personas que trabajamos en  tratamiento de drogodependencias, nos encontramos que las mujeres con problemas de adicciones presentan a su vez, en muchos casos, numerosos antecedentes de violencia en la familia, tanto de género, como violaciones, abusos u otros.
De la misma manera, entre las consecuencias del maltrato en la salud de las mujeres, suele mencionarse el abuso de alcohol, benzodiacepinas y otras drogas. La mayoría de los estudios (Villacencio Carrillo y Sebastián Herranz, 2001) señalan que un 10% de las mujeres maltratadas abusan de alguna/s droga/s.

El desconsol, de Josep Llimona
En el caso de las mujeres, la relación entre drogodependencia y maltrato puede seguir direcciones diferentes. En el estudio de Kilpatrick y Best (1990), la violencia sufrida resultó ser el mejor predictor de la adicción al alcohol u otras drogas. Por otro lado, el uso de estas sustancias , puede ser una estrategia de afrontamiento ante la ansiedad extrema, el insomnio o la angustia derivada del maltrato.
En estos casos nos encontramos que la adicción y el maltrato en mujeres se convierte en una doble vulnerabilidad, que interrelacionan en los 2 sentidos, tanto como antecedente (la mujer consume antes de las experiencias del maltrato en la pareja) como consecuente (la mujer consume como consecuencia de la violencia de género).
Según Testa en 2004 el uso de drogas en la mujer contribuye a la aparición e incluso al mantenimiento de agresiones sexuales y victimización física.


Cuando se detectan dificultades en este ámbito, no son derivadas a centros específicos de violencia, sino que permanecen en la red de drogodependencias. Generalmente es algo que queda por trabajar cuando se le da el alta a la paciente, además de que es un elemento que influye en el abandono del tratamiento e interacciona con el mantenimiento de la dependencia a la sustancia.

También comentar, que a menudo el equipo terapéutico detecta la situación, pero se encuentra con la negación de la paciente a abordar ese tema. La violencia de género, en este sentido, tiene una fase de negación al igual que las adicciones. De la misma manera que a las personas les cuesta, y es un proceso largo, reconocer que tienen una adicción, las mujeres maltratadas pasan por unas fases similares para poder identificar que están sufriendo situaciones de maltrato.

¿ A QUÉ RED PERTENECEN ESTAS MUJERES? ¿DÓNDE LAS TRATAMOS?

A nivel de tratamiento nos encontramos que, las mujeres que tienen problemas de adicción son rechazadas en la mayoría de los centros de la red de violencia del mismo modo que las mujeres con problemas de violencia de género se encuentran excluídas de los programas de drogodependencias.

Esto se explica  por:

  •   Los centros de drogodependencias son abiertos, no hay seguridad, son fácilmente localizables, en muchos se pide la colaboración familiar a lo largo del tratamiento, e incluso en algunos se realizan visitas y terapias familiares. Que la mujer presente una situación de maltrato activa significa que en estos centros no podrá estar protegida de su maltratador, suponiendo un riesgo para ella y para el centro. Además si la mujer tiene hijos, tendrá que renunciar a ellos o delegar la guarda, ya que los centros de tratamiento no aceptan niños. (Actualmente existen muy pocos recursos residenciales en los que la mujer pueda convivir con sus hijos)
  •   Por otro lado en la red de violencia de género, nos encontramos que no trabajan adicciones, por lo que la persona puede disponer de dinero, hacer salidas, comprar sustancias,...lo que puede perjudicar a la convivencia con las otras residentes y sus hijos. Al no trabajar este tema, la mujer puede seguir manteniendo su adicción con toda la problemática que eso comporta tanto para ella, sus hijos y las demás usuarias que conviven en el centro.

Actualmente los profesionales de las 2 redes son más conscientes de la situación, y se han diseñado programas específicos,  pero con muy pocos recursos y plazas.


ORIENTACIONES TERAPÉUTICAS/ CONCLUSIONES

A continuación señalaremos algunas orientaciones terapéuticas y aspectos importantes a destacar para prevenir y trabajar la violencia de género con estas mujeres y con mujeres adictas en general.

·       En perfiles de mujeres adictas se debe valorar y explorar las relaciones de pareja  para detectar posibles situaciones de riesgo y maltrato activo, tanto físico como psicólogico.

·       Por otro lado, con mujeres que sufren violencia de género se debe explorar posibles abusos y/o adicciones, tanto a sustancias legales, como ilegales como adicciones comportamentales.

·       Si se detectan las 2 situaciones, es importante poder abordarlo con la persona para que  un aspecto no interfiera el otro y explicarle detalladamente como una puede obstaculizar en el proceso de evolución de la otra, y la importancia de trabajar las 2 a la vez. Es importante nombrar las cosas y explicitarlas, además de una atención integral del problema.

·       Sería importante y recomendable diseñar grupos específicos de violencia de género en la red de drogodependencia  y de adicciones en la red de violencia, para así generar consciencia y prevenir e identificar posibles situaciones.

·       Es imprescindible que los profesionales  que trabajen en cualquiera de las 2 redes dispongan de formación complementaria tanto en adicciones como en violencia de género, como de perspectiva de género, de esta manera se ayudaría a identificar las problemáticas y a su mejor abordaje.

·       Es imprescindible la coordinación entre las 2 redes (adicciones /violencia de género) y en caso necesario y posible se deben trabajar las 2 a la vez. 

·       Es necesario que los profesionales que trabajen en la red, tanto de violencia como de drogas, se conciencien de la problemática y  del abordaje terapéutico y específico que requiere.



Castaños, M y Meneses, C y col. ; Intervención en drogodependencias con enfoque de género, Instituto de la mujer, 2007 
Martínez Redondo, P; Investigación sobre la intervención en drogodependencias y malos tratos a mujeres en las redes de atención, UNAD 2010

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